TODO ESTA BIEN
Amable lector: Nos enseña la historia que civilizaciones tales como el antiguo Egipto, el imperio Persa, el mundo Griego, las dinastías Chinas y el gran imperio Romano, después de permanecer muchos años como el centro del mundo, todas se fueron desdibujando, hasta perder, unas la fuerza y otras el esplendor de antaño.
En contraste con lo anterior, un país como el nuestro, que a duras penas está saliendo del período de la patria boba, jamás le ocurrirá algo similar, pues siempre conservara su identidad.
Después de más de un mes de la parálisis del sector de la justicia, salvo algunos pocos contratiempos, todo sigue igual. Sería mucho más traumático, que un fin de semana no hubiera futbol, por culpa de una huelga de los jugadores, a que los juzgados estén cerrados.
Hace algunas semanas ocurrió el asesinato de seis policías en el municipio de Puerto Tejada. No se había terminado el consabido consejo de seguridad, cuando murieron tres policías más en una de la comunas de Medellín. Mientas se enterraban estos humildes servidores de la patria, se supo de la masacre de 10 campesinos en Santa Rosa de Osos. Salvo las madres, viudas y huérfanos que lloran sus muertos, todos nos olvidamos de tan abominables crímenes, incluyendo el propio Estado.
Esta semana, la guerrilla decretó un paro en el Departamento del Chocó. El tráfico terrestre y fluvial está casi paralizado. El señor ministro de Defensa manifestó que esto era una guerra de papel. Para que sus palabras tengan fuerza y sirvan de ejemplo, debería en uno cualquiera de los buses que salen de Medellín a Quibdó, viajar como un simple pasajero. De paso, inclusive puede observar como va la reconstrucción de la carretera.
La firma Interbolsa hasta hace poco símbolo del buen manejo de los dineros de los ahorradores, fue declarada inviable. Igual que en casos anteriores, sus directivos, funcionarios de las entidades de control oficial y el señor revisor fiscal, ni oyeron ni vieron nada, que les hiciera pensar que esta sociedad estaba al borde del precipicio.
Cuando un campesino, casi siempre ignorante, ve nubarrones en el cielo, sabe que va a llover. Igual ocurre con el maestro de una obra cuando observa que un muro esta inclinado, sabe que se va venir abajo. O el dueño de unas gallinas, que sin ser demasiado malicioso, sabe que quien las cuida se queda con parte de los huevitos. Es por todo ello que cuesta demasiada dificultad comprender que los directivos y funcionarios de las entidades oficiales, nunca se desvelaron con el manejo de esta sociedad.
Según nuestra Constitución Política, el presidente es quien debe conservar el orden público y restablecerlo donde fuera turbado. También debe vigilar y controlar las personas que realizan actividades financieras. Como una clara demostración de que todo está normal, se fue de viaje para Portugal y España. Ojalá pudiera visitar el Santuario de Fátima, para pedirle a la Virgen les haga el milagro a los miles de hombres y mujeres que esperan recibir la pensión mínima de jubilación.
Medellín, 16 de Noviembre de 2.012
Rafael Isaza González